Son frecuentes, sobre todo dentro del campo científico, las críticas a Pierre Teilhard de Chadin (1881-1955). Y no sin falta de razón. En España las ideas de Teilhard se difundieron a través de sus 12 volúmenes de ensayos filosóficos y religiosos publicados por Taurus entre 1960 y 1970. Y por otra parte, la fecunda obra teilhardiana del paleontólogo Miquel Crusafont (ultrateilhardiano en sus planteamientos) fue muy leída en los ambientes científicos. Para Crusafont, el vitalismo y el finalismo, así como lo que llama "ortogénesis de fondo" forman parte el paradigma científico de la paleontología. Este confusión de planos entre la ciencia y la filosofía, ha llevado al menosprecio de las ideas cientíificas de Teilhard. El curriculum vitae, publicado en 1948 y la valiosa Obra científica en once gruesos tomos publicada en 1971 son una guía necesaria para la recuperación del Teilhard científico (separado del Teilhard filósofo, místico y poeta). Este es un libro apasionado por la figura de Teilhard en su intento de INTEGRAR DE FORMA INTERDISCIPLINAR la ciencia y la religión.